La verdad es que no se qué hacer. Morales cada día que pasa está peor. El asesino sabe que lo estamos buscando. Tengo un juez que es un estúpido. A Irene la quiero matar. Y el único tipo en el que confío en este mundo es un borracho, un pelotudo de mierda. Tengo una ventaja, chiquita, pero es una ventaja. Hoy es 28, ¿no es cierto? El borracho pelotudo todavía no cobró el sueldo; el del mes pasado... ya se lo chupó. Así que cuando el barman quiera cobrar, el tipo se va a enfrentar a un dilema: o le dice que no tiene plata, va en cana, se agarra a las trompadas, se arma flor de quilombo y su mujer definitivamente lo echa de su casa, o se da vuelta hacia el boludo de su jefe, que vengo a ser yo, y le pide que pague. Eso sí, como el jefe es boludo pero no es tan boludo, va a pagar, una vez más, pero se lo va a cobrar con un favor. Y el borracho pelotudo no le va a poder decir que no. ¿No es cierto?.
El secreto de sus ojos.